DECLARACIÓN UNIVERSAL SOBRE LA RESPONSABILIDAD PARA SALVAR AL MUNDO

DECLARACIÓN UNIVERSAL SOBRE LA RESPONSABILIDAD PARA SALVAR AL MUNDO

Preámbulo

Considerando la Declaración Universal de los Derechos Humanos de las generaciones futuras, la Declaración sobre las Responsabilidades de las Generaciones Presentes hacia las Generaciones Futuras, la Declaración de los principios de la cooperación cultural internacional, el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, la Convención para la Protección del Patrimonio Mundial Cultural y Natural, la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, el Convenio sobre la Diversidad Biológica, la Declaración de Río sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo, la Declaración y Programa de Acción de Viena;

Ratificando la Declaración Universal de Derechos Espirituales, la Declaración Universal de Derechos Ecológicos, la Declaración Universal sobre el Derecho a la Paz Mundial, la Declaración Universal sobre los Derechos de los Pueblos Budistas y Comunidades Espirituales, y la Declaración Universal sobre los Derechos de los Seres No-Humanos;

Asumiendo el compromiso social de los Seres Libres e Iluminados (Arhats-Bodhisattvas) de salvar del sufrimiento a todos los seres sintientes;

Recordando el inconcluso compromiso asumido por la comunidad internacional de salvar a las generaciones futuras de los flagelos de la guerra, lo cual es un principio establecido en las constituciones de la UNESCO y la ONU;

Mostrando preocupación por las amenazas históricas que enfrenta la humanidad para poder sobrevivir, como son los males de la guerra, la pobreza, la ignorancia y la contaminación;

Recalcando que el respeto de los derechos humanos y derechos de la Madre Tierra constituye la base para la salvación de la humanidad y la naturaleza, construyendo una civilización basada en la paz mundial, la justicia social, la educación avanzada y la salud ambiental;

Subrayando la necesidad de establecer vínculos de solidaridad con los otros seres vivos y ecosistemas, pues la humanidad interexiste con todo el campo de la vida;

Convocando a las generaciones del presente a tener Atención Plena hacia el cumplimiento del deber de garantizar la existencia segura de las generaciones del futuro;

Determinando que para salvar al mundo se debe abandonar la carga arquetípica que es la repetición de los errores de las generaciones del pasado;

Reconociendo la misión ética de los maestros espirituales al momento de proteger los intereses de la humanidad y los seres sintientes, pues la Espiritualidad es un Camino de serenidad, ley, conocimiento y solidaridad;

Teniendo en cuenta que el destino de la humanidad depende de las acciones que tomen las generaciones presentes, las cuales deben resolver urgentemente los problemas de la guerra, la pobreza, la ignorancia y la contaminación a fin de dejar un mundo sano para las generaciones futuras;

Asegurando que el Budismo tiene la obligación ética y espiritual de formular un liderazgo mundial, orientando y guiando la civilización hacia la Salvación y no hacia la actual perspectiva de destrucción;

La Organización de las Naciones Budistas Unidas proclama solemnemente la DECLARACIÓN UNIVERSAL SOBRE LA RESPONSABILIDAD PARA SALVAR AL MUNDO.

Artículo 1 – La humanidad tiene el deber de proteger los intereses y necesidades de las generaciones presentes y futuras por medio de acciones humanitarias y ambientalistas.

Artículo 2 – La humanidad tiene el deber de defender la libertad, igualdad y fraternidad, especialmente los derechos humanos fundamentales y el desarrollo político, económico, cultural y ambiental de los pueblos.

Artículo 3 – La humanidad tiene el deber de preservar la riqueza ética y espiritual de todas las tradiciones del pasado y presente, permitiendo que las mismas puedan desarrollarse para persistir y evolucionar en el futuro.

Artículo 4 – La humanidad tiene el deber de mantener y perpetuar la vida, asegurándose que las especies puedan sobrevivir con dignidad, pues el ser humano no tiene derecho alguno para destruir a los seres sintientes.

Artículo 5 – La humanidad tiene el deber de preservar la diversidad, equilibrio e integridad de los ecosistemas, promoviendo el desarrollo industrial sustentable sin depredación de los recursos naturales y sin contaminación de la flora y fauna.

Artículo 6 – La humanidad tiene el deber de proteger la existencia y salud de la Madre Tierra, no destruyendo los órganos del cuerpo planetario que son los ecosistemas, pero tampoco obstaculizando o dañando a los sistemas de autorregulación y autosanación de la Madre Tierra.

Artículo 7 – La humanidad tiene el deber de que el desarrollo tecnológico esté en armonía con la vida, no debiendo bajo ninguna circunstancia poner en peligro la supervivencia del mundo, por lo que tecnologías como las armas de destrucción masiva deben ser abolidas.

Artículo 8 – La humanidad tiene el deber de proteger su patrimonio genético, respetando la dignidad intrínseca del ser humano al momento de realizar intervenciones científicas que afecten a las generaciones presentes o futuras.

Artículo 9 – La humanidad tiene el deber de proteger y preservar los patrimonios y legados culturales, contribuyendo a la transmisión de este patrimonio común.

Artículo 10 – La humanidad tiene el deber de propiciar la cooperación intercultural, especialmente entre distintas religiones y distintas civilizaciones, pues el espíritu de amistad y apoyo mutuo es la mejor educación ética y espiritual para los pueblos, fomentando la toma de consciencia de que la paz y la justicia son fundamentales para la Salvación del mundo.

Artículo 11 – La humanidad tiene el deber de brindar educación avanzada y libre para todos los pueblos y clases sociales, pues la educación es el principal recurso y poder para que todo sujeto se desarrolle y libere de la miseria de la guerra, pobreza y contaminación.

Artículo 12 – La humanidad tiene el deber de crear un mundo de paz, justicia social, tolerancia y solidaridad, donde cada ser humano se beneficie de la sabiduría compasiva y pueda tener acceso pleno a una vida de Liberación y Despertar.

Artículo 13 – La humanidad tiene el deber de identificar, proteger, conservar y transmitir el patrimonio espiritual a las generaciones del presente y futuro, lo cual es la clave para la Salvación del mundo.

Artículo 14 – La humanidad tiene el deber de asegurar que las generaciones del presente y futuro puedan lograr la Salvación y Evolución del mundo, asegurando que cada sujeto, institución o gobierno asuma la responsabilidad de contribuir a los ideales de este Propósito Supremo que es la misión ética de la Organización de las Naciones Budistas Unidas.

Fecha: 10 de Febrero de 2017

Por Maestro Maitreya Samyaksambuddha

Presidente de la Organización de las Naciones Budistas Unidas

Leave a Reply

Fill in your details below or click an icon to log in:

WordPress.com Logo

You are commenting using your WordPress.com account. Log Out /  Change )

Facebook photo

You are commenting using your Facebook account. Log Out /  Change )

Connecting to %s